Modelo se basa en la descentralización del capital, en lugar de depender de grandes inversionistas o entidades financieras.
En un escenario económico caracterizado por la incertidumbre y la búsqueda de nuevas fórmulas para resguardar el ahorro, comienza a ganar espacio en Chile el modelo de inversión colectiva en bienes raíces, también conocido comocrowdfunding inmobiliario. Bajo esta lógica surgeMy Way, una plataforma digital que propone abrir el acceso a proyectos inmobiliarios a personas que tradicionalmente han estado fuera de este mercado.
A través de un sistema que permite participar con montos significativamente más bajos que los exigidos en los mecanismos convencionales, esta plataforma busca ampliar el universo de inversionistas. Desde trabajadores independientes y jóvenes profesionales, hasta personas que por primera vez deciden explorar el mundo de las inversiones, todos pueden participar en el financiamiento de desarrollos inmobiliarios seleccionados.
Un modelo descentralizado
El modelo se basa en la descentralización del capital. En lugar de depender de grandes inversionistas o entidades financieras, los proyectos se financian mediante el aporte conjunto de múltiples personas, cada una con una participación proporcional a su inversión.
Esta lógica permite distribuir el riesgo, facilitar la participación ciudadana y fomentar una cultura financiera más inclusiva. Para Álvaro Barías, cofundador de la plataforma, se trata de “una manera de repensar el acceso al mercado inmobiliario, que por años ha funcionado con estructuras poco accesibles para la mayoría de la población”.

Tecnología y transparencia como base
Una de las claves del funcionamiento está en el uso intensivo de herramientas tecnológicas. La plataforma opera completamente en línea y permite a los usuarios conocer en detalle las características de cada proyecto antes de decidir participar.
Cada iniciativa disponible cuenta con una ficha técnica que detalla aspectos como el tipo de construcción, la ubicación, los plazos estimados, las proyecciones de rentabilidad y los riesgos asociados. Asimismo, todos los proyectos están certificados y supervisados por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), lo que busca garantizar un estándar mínimo de seguridad y confianza.
Este enfoque en la transparencia es considerado por sus impulsores como un elemento esencial del modelo. “Creemos que la confianza se construye con información clara, accesible y verificable. Por eso ponemos a disposición de los usuarios todos los antecedentes relevantes para que puedan tomar decisiones informadas”, señala Barías.
Alternativa frente a barreras tradicionales
Otro de los factores que explican el interés creciente en este tipo de plataformas tiene que ver con las dificultades que enfrentan muchas personas al intentar invertir a través de los canales tradicionales. Las exigencias de capital, los largos procesos burocráticos y la concentración de oportunidades en ciertos sectores económicos o sociales han generado, por años, una barrera de entrada difícil de superar.
Frente a ese panorama, la plataforma propone un mecanismo más ágil y directo, que elimina intermediarios y reduce la complejidad operativa. Según sus fundadores, el propósito no es solo financiero, sino también cultural: democratizar el acceso a instrumentos que históricamente han estado reservados para unos pocos.
Impacto territorial y colaboración
Más allá de los aspectos técnicos, quienes participan de esta iniciativa también valoran el componente colaborativo del modelo. En lugar de inversiones individuales, opacas y distantes, el crowdfunding inmobiliario permite que los aportes contribuyan al desarrollo de proyectos concretos, con impacto visible en comunidades locales.
Un fenómeno en crecimiento
Si bien se trata de una práctica aún incipiente en Chile, elcrowdfundinginmobiliario ha mostrado un crecimiento sostenido en otros países, como Estados Unidos, España y México. En esos contextos, ha permitido dinamizar el sector inmobiliario, especialmente en ciudades intermedias o regiones menos centralizadas, y abrir oportunidades a emprendedores y desarrolladores locales que no acceden fácilmente a financiamiento bancario.
(Fuente: trade-news.cl)